Así, se quedó dormida, mientras sostenía entre sus dedos un pequeño trozo de papel. Una fotografía en blanco y negro, la prueba de que no todo había sido un mal sueño, un retrato que le había robado un pedazo de alma.
domingo, 5 de abril de 2009
fotografía
Así, se quedó dormida, mientras sostenía entre sus dedos un pequeño trozo de papel. Una fotografía en blanco y negro, la prueba de que no todo había sido un mal sueño, un retrato que le había robado un pedazo de alma.
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Está bien eso de tener algo que pruebe que no todo fue una perdida de tiempo. (Lo malo que casi nunca es así)
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